lunes, 29 de mayo de 2017

Ni una menos. Ni una Mas

Hoy también.
Una mujer menos. 
Otra nueva víctima.
La mató porque "la amaba".
Otro verdugo disfrazado
de pareja íntima.   
A otra la mató su ex
porque ya no se le arrima 
y no debe vivir 
si al macho subestima. 
Y a la compañera de trabajo,
o quizás a una vecina, 
que casi ni le mira 
y con eso le lastima: 
"Si tu a mi no me quieres, 
yo a ti te doy la ruina."

La culpa es femenina.
Culpable, la mujer. 
Si no quisiste, haber querido; 
si quisiste, por querer. 
Si tapas, por mojigata; 
si enseñas, por dejar ver. 
Si hablas, porque te quejas 
y si callas por ceder. 
Si tienes cuerpo, provocas. 
Asúmelo, es tu culpa.
Es tu cuerpo de mujer. 
Ese cuerpo. 
El que no supiste proteger. 
Porque eres libre, muchacha.
Y fuiste libre al escoger 
pasar por una calle oscura
después de anochecer. 
¿Qué te ha violado tu novio? 
No me lo puedo creer. 
Eso son cosas de pareja. 
Eso son cosas del querer. 
En todo caso, presunto. 
Y presunta, tu culpabilidad. 
Será una denuncia falsa, 
por celos, o por maldad... 
Que somos malas, muy malas. 
Y unas histéricas, también. 
Y si estuvieras callada, 
todo te iría bien.
Pero a los hombres les matan
y las mujeres se mueren. 
¿Qué mueren asesinadas? 
Pues son cosas que suceden; 
se cocina el titular
y ya está: desaparecen. 
¿Cuántos feminicidios esta semana? 
¿Es el segundo? ¡Es el tercero! 
No es un goteo constante de sangre: 
Es un reguero. 
Y cuando llega el Nuevo Año, 
el contador a cero. 
Aunque nos maten por cientos,
para frenarlo, el Gobierno, 
nunca tiene presupuesto.

Pero no todas dormimos. 
El feminismo ha despertado. 
Así que perdonen las molestias 
si les hemos molestado 
al picar en los cimientos 
del maldito patriarcado. 
Siento comunicarles: 
Esto solo ha comenzado. 
Y no vamos a parar 
hasta que el machismo sea
una cosa del pasado. 
Contra vuestro machismo,
¡Feminismo organizado!